martes, 18 de noviembre de 2008

Goldman Sachs asume las operaciones financieras para reabrir la mina

EMED Mining ha llegado a un acuerdo para que Goldman Sachs encabece la operación financiera necesaria para el reinicio de la explotación de las minas de Riotinto para que garantice los precios del mercado del cobre y financie los avales y garantías requeridas a su filial Emed Tartessus, cuya propiedad tiene asumida al 100%, para reiniciar la explotación.

Goldman Sachs es una importante banca de inversión internacional, con gran presencia en España, donde tiene un buen número de clientes institucionales y privados, según indicó la empresa.

Este nombramiento de Goldman Sachs como gestor financiero del proyecto y operaciones de cobertura o 'hedging' es "un paso adelante" en los preparativos del reinicio de la mina, al que debe seguir la aprobación de las autoridades reguladoras. Emed Mining requerirá, igualmente, "la aprobación de sus accionistas y mientras tanto sigue haciendo preparativos para el reinicio, progresos en el proceso de los permisos y resolución de las negociaciones en marcha".

El consejero delegado de Emed Mining, Harry Anagnostaras-Adams, declaró que han hecho "un gran trabajo en España para limpiar la complicada estructura legal, superar los conflictos en disputa que se heredaron y también en la mina para prepararla para el reinicio de un modo seguro y eficiente. Esto se ha hecho con el consejo y el apoyo internacional legal de especialistas en esta industria, como la firma de abogados Baker&McKenzie y expertos en proyectos mineros, como AMC Consultores".

Emed Mining, según añadió su consejero delegado, es "consciente de la preocupación en las instituciones locales por asegurar que el proyecto Riotinto se reinicia de un modo responsable y se comienzan a notar el resultado de los esfuerzos y la recuperación de la confianza en el entorno local".

Los accionistas principales de Emed Mining, el Consejo y la dirección "son, todos, expertos en la industria minera internacional con experiencia, y no tienen ninguna relación con los problemas o las partes implicadas en el pasado en la mina", según quiso aclarar Anagnostaras-Adams.

El "orgullo" de Emed se basa en su "integridad, su transparencia y su interés en avanzar conforme a todas las normas establecidas, locales e internacionales".