El Zalamea cae ante Medina Arsena (0-2), en su primer envite como local en tierras campilleras. El equipo serrano supo aprovechar sus escasas llegadas (en el descuento de la primera parte y a los pocos minutos de la reanudación) para conseguir el triunfo_Las dimensiones del Valero Rojas no favorecen la apuesta del míster zalameño.
Está claro, a estas alturas, que el equipo entrenado con Juanma está compuesto por un plantel que intenta practicar un futbol alegre y de toque. Estas circunstancias hacen que muchas veces los jugadores zalameños no se encuentren cómodos sobre el terreno de juego y sufran las consecuencias de una categoría donde prima lo físico. El Francisco Valero Rojas de El Campillo es un campo con unas dimensiones más bien reducidas y la estrechez del mismo entorpeció bastante el juego de ataque. Jugadores como Rubén sufrieron de lo lindo para mandar balones a los interiores y el juego se condicionó al centro, por donde mejor defendía el adversario.
Los primeros compases del encuentro fueron de tanteo entre ambas escuadras, el Zalamea intentaba imponer su juego rápido y combinativo y el contrario se limitaba a secar cualquier acercamiento y desplegar su fútbol directo y expeditivo. Así transcurrió toda la primera parte (continuas faltas), hasta que en el 44 de partido llegó la primera acción con cierto peligro; bolea de Portu a la media vuelta desde la media luna que salió rozando el larguero. Un minuto después llegó una clara ocasión tras un lanzamiento de falta botada por Rubén, pero el remate de José Javier se fue al larguero cuando se cantaba gol en el graderío. Para colmo de males, en el descuento de la primera mitad llega el gol visitante en su primer acercamiento con peligro al área local. Con este jarro de agua fría se llegaba al descanso, donde Juanma mandó calentar a David del Toro. Apuesta ofensiva, ya que se quedó en la caseta el central Edu.
El Zalamea salió decidido al ataque y en apenas unos minutos llegó una clara ocasión para lograr el empate; pero Portu no supo dirigir bien su chut desde fuera del área. El partido atravesaba esos minutos que se antojan clave para el devenir del mismo. El Zalamea intentaba llevar el peso del juego, pero sus intentos morían sin verdadero peligro en las inmediaciones del área visitante. El equipo serrano cerró bien las bandas y ante esta imposibilidad, acuciada por las dimensiones del terreno de juego, los centrocampistas zalameños intentaron entrar por el centro una y otra vez. Este juego favoreció al equipo visitante, que se mostraba cómodo sobre el terreno de juego y con posibilidades de montar algún que otro contragolpe. Así llegó la jugada que puso el 0-2 en el marcador, minuto 13 de partido; un centro desde la banda sin mucho peligro es rematado en semichilena por un contrario y el balón sorprende a Luisfe.
Varapalo para el Zalamea, que veía como el partido se les escapaba en una tarde aciaga y sin acierto arriba. De aquí al final, la misma tónica, el equipo zalameño intentado crear peligro y el equipo serrano defendiéndose con las líneas muy juntas. Pirulo lo intentó una y otra vez por el flanco derecho y José María por su costado izquierdo, pero siempre tenían dos jugadores cercando cualquier intento. Rubén y David del Toro intentaron crear juego pero sus intentos no consiguieron meta alguna, y jugadores como Portu e Iván no tuvieron su día.
En definitiva, partido feo para el Zalamea que sigue sin conseguir algo positivo en el Valero Rojas; un campo que no se presta, por sus dimensiones, al fútbol alegre del equipo zalameño.