Nubes oscuras y densas atenuaban la alegre vista del pueblo ayer por la tarde, amenazando con descargar las primeras aguas de un otoño que se ha hecho esperar en nuestra tierra. Las calles semivacías, acogían a pequeños grupos de transeúntes que caminaban por Zalamea con los avíos propios de la época inclemente. Tardes oscuras y frías, que tienden a recortarse con inexorable premura, con un Sol tenue y presto a velarse por El Villar.Una borrasca traerá sucesivos frentes a nuestro pueblo, por lo que la inestabilidad será la dominante durante gran parte de la semana. La nubosidad será abundante, predominando el cielo muy nuboso o cubierto acompañado de precipitaciones que pueden ser fuertes y persistentes. Con algunas interrupciones, seguirán al menos hasta el viernes e incluso, probablemente, hasta el final de la semana. Las temperaturas subirán u
n poco por la noche y serán significativamente más bajas, de 5 a 7 grados, por el día a partir de hoy. El viento dominante será de componente Oeste, soplando en algunos momentos, de forma moderada.Resumiendo, temporal de lluvia y viento, con descenso de las temperaturas máximas. La lluvia de la semana podrá superar lo 50 litros por metro cuadrado, paliando un poco, el gran déficit que arrastramos en la zona, donde la situación de nuestros campos empezaba a ser alarmante para la época en la que estamos.
