El equipo de Falcón no fue capaz de puntuar ante un rival que se quedó con diez jugadores prácticamente durante toda la segunda parte tras la expulsión de Rivero en el minuto 48.
En la primera mitad fueron los pupilos de Paco Marmesá los que llevaron la iniciativa. Muy pronto los locales cobraban ventaja tras un penalti de Jesús a Rivero que el especialista Yoni se encargó de transformar en el 1-0, que a la postre sería definitivo.
Con un juego vistoso y al primer toque el Nerva deleitaba a sus seguidores y ponía en serios aprietos a los zalameños, que intentaban arropar con muchos efectivos a su portero Jonathan. Los locales buscaban ampliar el marcador y tenían como principal referente ofensivo a su estilete Yoni. El primer periodo fue prácticamente un monólogo nervense ante un Zalamea que apenas se estiró.
En la reanudación la roja que vio Rivero cambió la tónica y los visitantes empezaron a buscar con mayor fe la igualada. Pero la juventud de los locales, y su esfuerzo, evitaron que los rojillos pudieran batir el portal de Kosé quien, con sus acertadas intervenciones, también fue otro de los artífices de la victoria.
Ambas escuadras dispusieron de alguna oportunidad para haber variado el marcador, pero no anduvieron excesivamente finos en el remate. Al final alegría de los seguidores nervenses en este duelo tan particular y airadas protestas de Falcón al trío arbitral, que completó una gran actuación. Sin duda la labor de los colegiados es de lo mejorcito de la Preferente.
En la primera mitad fueron los pupilos de Paco Marmesá los que llevaron la iniciativa. Muy pronto los locales cobraban ventaja tras un penalti de Jesús a Rivero que el especialista Yoni se encargó de transformar en el 1-0, que a la postre sería definitivo.
Con un juego vistoso y al primer toque el Nerva deleitaba a sus seguidores y ponía en serios aprietos a los zalameños, que intentaban arropar con muchos efectivos a su portero Jonathan. Los locales buscaban ampliar el marcador y tenían como principal referente ofensivo a su estilete Yoni. El primer periodo fue prácticamente un monólogo nervense ante un Zalamea que apenas se estiró.
En la reanudación la roja que vio Rivero cambió la tónica y los visitantes empezaron a buscar con mayor fe la igualada. Pero la juventud de los locales, y su esfuerzo, evitaron que los rojillos pudieran batir el portal de Kosé quien, con sus acertadas intervenciones, también fue otro de los artífices de la victoria.
Ambas escuadras dispusieron de alguna oportunidad para haber variado el marcador, pero no anduvieron excesivamente finos en el remate. Al final alegría de los seguidores nervenses en este duelo tan particular y airadas protestas de Falcón al trío arbitral, que completó una gran actuación. Sin duda la labor de los colegiados es de lo mejorcito de la Preferente.