domingo, 4 de enero de 2009

El Zalamea encuentra su patrón de juego

Victoria importantísima sobre el Encinasola, uno de los gallitos de la categoría. Portu con una actuación memorable fue el artífice de la goleada zalameña con tres goles. El equipo brilló a una gran altura sobre un terreno de juego en pésimas condiciones.

El año no podía empezar de mejor manera para la escuadra zalameña, y es que, tras la racha negativa cortada frente al Campillo, el partido de ayer se presentaba como un regalo de Reyes para alzarse con los tres puntos. Este partido se tenía que haber disputado el pasado 7 de diciembre, pero la lluvia lo aplazó hasta el día de ayer. Curiosamente el terreno de juego no se prestaba al juego bonito, pero el Zalamea planteo un fútbol intenso desde el pitido inicial y como fruto del dominio llegaron los dos goles tempraneros, obra de Jesús y Portu. Hay que destacar la capacidad goleadora que están aportando estos dos jugadores; Jesús, pese a que nunca a destacado en esta faceta, alcanza ya 4 goles en su cuenta, y Portu se encuentra en un momento magnífico de forma y suma 6 goles en lo que va de temporada. El 9 zalameño asume su rol y se muestra convencido de llegar a más de 10 goles este año.

Al cuarto de hora el equipo zalameño ya vencía por dos goles y seguía dominando el juego con total autoridad. Juanma desde la banda pedía presión y los jugadores se multiplicaban a la hora de hacerse apoyos cubriendo todo el perímetro central. El míster zalameño había conformado de entrada un trivote que se repetirá muchas veces a lo largo de la temporada. Rubén, Plablo y Meka eran los dueños de la parcela ancha y hacían jugar al equipo de forma magistral. Todo funcionaba a las mil maravillas hasta que llegó un fallo en la zaga y el Encinasola aprovechó para acercarse en el marcador (minuto 35). De aquí al descanso, el equipo rival se mostró más expeditivo y buscó la manera de hacer daño a la meta defendida por Juan Centeno.

Al descanso se llegó con los nervios de un marcador ajustado, pero al comienzo de la segunda parte se disiparon todas las dudas, ya que, al igual que en la primera mitad, el Zalamea consiguió dos goles tempraneros y contundentes. Portu puso el broche de oro a una gran jugada personal alojando el esférico por la escuadra en un chut desde fuera del área. A los pocos minutos, cuando aun se saboreaba el golazo anterior, de nuevo el delantero perfora la portería tras una jugada de Rubén por la banda. Gran celebración del equipo que veían como se colocaban claramente por delante en el marcador con un contundente 4-1. Pese a lo abultado del marcador, el Encinasola daba muestras de su potencial y no le perdía la cara al partido, lo que hacía que el público del Valero Rojas asistiera a un bonito espectáculo. Lo más significativo del encuentro de ayer fue la intensidad con la que jugó el partido el Zalamea en todas sus líneas, lo que dificultaba de sobremanera el juego del equipo rival. Juanma en estos minutos se vio obligado a introducir cambios, ya que cayeron lesionados José por un golpe en el glúteo y José Javier que no termina de recuperarse y no aguanta los 90 de partido. Sustituyendo a los defensas salieron Edu en el lateral y Miguel para ocupar un puesto en el centro del campo, lo que hizo que Pablo retrasara su posición para situarse de central. El 4-2 llegó como consecuencia de un fallo de Juan a la hora de atajar el esférico, que no pudo evitar que se le escurriera por debajo del cuerpo tras un bote traicionero.

El terreno de juego se ponía cada vez más impracticable, lo que hizo que el partido se pusiera bronco y tosco. Quedaban 20 minutos y el resultado no se veía peligrar por lo que Juanma quiso darle descanso al protagonista de la tarde y sustituirlo por Iván. Como consecuencia del mal estado del terreno llegó la lesión de Rubén en su tobillo derecho y tuvo que ser sustituido por Luisfe, segundo portero, que tuvo que hacer las veces de centrocampista. Antes el árbitro había expulsado a uno de los centrales del Encinasola por encararse con el banquillo zalameño, y a Meka por protestar de forma reiterada.








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A pocos minutos del final llegó el tercero del Encinasola, pero no había tiempo para más, bueno sí, el árbitro en una decisión incomprensible expulsó a Iván por no querer sacar desde el centro del campo tras el gol rival. Hay que explicar, para los que no vieran la acción, que en estos momentos Juan Centeno estaba siendo asistido por el masajista aquejado de un golpe en la jugada anterior, pero el árbitro en enajenación mental quiso que se prosiguiera el juego. Es incomprensible que los encuentros tengan cada domingo estos tintes surrealistas y el reglamento se salte a la torera de forma incomprensible.

Pese a todo, victoria importantísima del conjunto local y un paso adelante en la clasificación; para los más optimistas significar que se sitúa a 9 puntos de la liguilla, un reto, que por el juego y el tesón de ayer, no parece tan descabellado.