El Zalamea cae derrotado 0-1 frente al Higuera en un partido gris donde no supo materializar las contadas ocasiones de las que dispuso. Rubén, que no fue de la partida, abandona la disciplina zalameña con la carta de libertad para fichar por el Dos Hermanas.
El partido comenzaba con dos ausencias importantes y no previstas, Juanma se ausentó del banquillo por problemas familiares y “el Mago” comunicó días atrás al club que el Dos Hermanas se había interasado por él. La entidad zalameña le ha concedido la carta de libertad, y Rubén militará por lo que resta de temporada en el equipo sevillano; una pérdida significativa e inesperada, que se hará notar en el equipo de aquí en adelante.
Pese a todo, el Zalamea saltó al campo con ganas de obtener su tercera victoria consecutiva, pero el empuje zalameño se fue diluyendo con el paso de los minutos y se tradujo en varios acercamientos del rival con cierto peligro. Los centrocampistas zalameños no se hacían con la parcela ancha y el Higuera se limitaba a bombear balones buscando las espaldas de los defensores zalameños. En una de éstas pudo llegar algún susto para Juan Centeno, pero gracias al buen trabajo en defensa llegaban sin mucho peligro a la meta. La única ocasión con peligro para el Zalamea llegó en el 40 de partido, cuando David del Toro, con todo a favor, mando el balón alto tras golpear en el larguero a una falta sacada por Pablo. Tras esta oportunidad, y cuando aún se lamentaba David, se llegó al término de la primera mitad.
La segunda parte comenzó con los dos equipos bien plantados atrás y con las líneas algo adelantadas, por lo que el juego se hizo poco fluido y con continuas interrupciones. El Zalamea llegaba a las inmediaciones del área una y otra vez, pero sin chutar a puerta, intentando apurar las jugadas que, incomprensiblemente, se perdían sin llegar a inquietar al meta rival. Sí se tuvo que emplear Juan Centeno con dos grandes estiradas que evitaron que el Higuera se pusiera por delante. El partido entró en unos minutos donde se atisbaba cierto conformismo por ambas escuadras y el empate servía para los dos; hasta que llegó el penalti a favor del equipo visitante, tras el derribo de un rival dentro del área a manos de José Javier. Penalti claro y gol, que pese a la estirada de Juan, subió al marcador para poner por delante a un equipo que no había hecho muchos méritos.
El gol visitante espoleó al conjunto zalameño y lo despertó del incomprensible letargo que había vivido hasta ese momento. En los 15 minutos hasta el final el conjunto dirigido por Domingo Bernabé desde el banquillo, propició las mejores ocasiones del partido e hicieron que la defensa visitante se empleara a fondo para defender las acometidas zalameñas. Con las líneas adelantadas y a base de una fuerte presión el Zalamea se adueñó del campo y se volcó sobre la meta del Higuera. Dos escalofriantes intervenciones del portero rival, sobre todo una a tiro de David del Toro, evitaron que el Zalamea empatara el partido, así como el infortunio tras un remate de Pablo que salió lamiendo el palo derecho. Para finalizar, mala suerte, pero si se hubiera jugado el partido como en los últimos 20 minutos el marcador hubiera sido favorable para el Zalamea, ya que el Higuera, al igual que otros rivales, no fue superior.