El Zalamea CF tiene mañana en su encuentro frente al Campillo un duelo de la máxima y una oportunidad para salir del túnel donde se ha metido por los últimos resultados. El equipo se refuerza con la incorporación de Pablo Matilla, que regresa a casa con la carta de libertad del Riotinto.
El duelo frente Al Campillo, por tratarse de un derbi minero, puede servir de trampolín para encarar las jornadas venideras con mejor ánimo, ya que los pupilos de Juanma se han metido en una espiral de resultados negativos que lo ha situado el tercero por la cola. Una victoria frente al Campillo serviría de espoleo y tranquilizaría los ánimos, algo crispados por las últimas derrotas.
Juanma ha recibido los reyes con antelación, ya que si la semana pasada, Juan Centeno se incorporaba a la disciplina del equipo tras un largo periodo de lesión, ayer se confirmó la vuelta de Pablo Matilla al equipo de su pueblo, tras su periplo de dos años en las filas del Riotinto Balompié. Pablo regresa a “la grana” con la carta de libertad del equipo minero y con la ilusión de un juvenil. Ayer realizó su primer entrenamiento con la plantilla y este domingo será de la partida, probablemente jugando en el centro del campo acompañando a Rubén. Pablo puede desenvolverse en varias demarcaciones, y el míster lo puede utilizar tanto en tareas defensivas como ofensivas; en su última campaña en Zalamea obtuvo 9 dianas.
El encuentro dará comienzo a las 16:00 horas en el Valero Rojas de El Campillo, pero claro, jugando como local. Se espera una gran afluencia de campilleros, por lo que desde el club se hace un llamamiento a la afición zalameña para que acompañe al equipo en este partido tan importante para el devenir de la temporada.
La plantilla no abandonará por completo el fútbol estas navidades, ya que el partido correspondiente a la 11ª jornada entre el Zalamea CF y el Encinasola, que se suspendió el pasado día 7 de diciembre, tiene fecha para su disputa, será el próximo día 3 de enero, sábado, a las 16:00 horas.