Mal encuentro del Zalamea CF en Valdelamusa donde cayó por un contundente 5-0. A los 5 minutos del comienzo ya había encajado dos goles y en el 10 se quedó con uno menos por expulsión a Pirulo. El equipo ha entrado en una dinámica muy negativa a la espera del derbi de la semana que viene frente al Campillo.
De comienzo el encuentro no se tenía que haber celebrado debido a las malas condiciones del terreno de juego por la lluvia. Ambas directivas se reunieron minutos antes para evaluar las condiciones del albero, muy encharcado, pero finalmente decidieron jugar en estas condiciones.
El Zalamea tiene un grave problema de concentración y en los minutos iníciales de cada periodo se ve vulnerable ante el empuje de los rivales que se ponen por delante con bastante facilidad. Este es el caso de este encuentro, ya que en la primera jugada, minuto 1 de partido, llegó el primero de penalti por manos de Eloy dentro del área. El batacazo se estaba escribiendo de forma rápida, ya que en esta misma jugada Pirulo vio la primera amarilla por protestar. A los pocos minutos y sin capacidad para reaccionar, llegó el segundo del Valdelamusa con un gran chut desde fuera del área que se cuela inapelable por la escuadra (minuto 5). Para colmo de males, antes de llegar a los 10 de partido Pirulo deja al equipo con diez por ser expulsado por otra protesta que le realizó al árbitro. Hay que significar que el míster zalameño estaba bastante molesto con el siete zalameño, y minutos antes había mandado calentar a Miguel para sustituirlo, pero no le dio tiempo a realizar el cambio cuando el interior abandonaba el terreno de juego forzosamente. Este año Pirulo ha visto seis tarjetas amarillas por protestar, habría que corregir este tipo de comportamientos que tanto daño le hace al equipo. El jugador tendrá que ver el esperado duelo frente al Campillo desde la grada, una baja más que significativa en la mermada línea atacante.
El Zalamea lo intentó pero sin acierto, y el Valdelamusa antes de llegar al descanso puso tierra de por medio marcando el 3-0 con el beneplácito del colegiado que no vio una falta previa sobre Jesús. Tarde mala en lo desapacible y en lo futbolístico, los jugadores entraron en la caseta apesadumbrados y con sino de no tener capacidad de reacción.
Juanma intentó hacer un cambio en el equipo dando entrada a Miguel por Isaac; valiente decisión pero a la desesperada, ya que conformó una defensa de tres para toda una segunda parte y con un terreno que a cada minuto se ponía más pesado. Los Jesús, Eloy y José, tres veteranos, se las tuvieron que ver en defensa para salvaguardar la portería de los incesantes ataques locales. Las líneas se adelantaron y el conjunto zalameño intento poner cerco al área local, pero los escarceos en ataque no se traducían en peligro y el Valdelamusa tenía autopistas libres para montar contras mortales de necesidad. Así llegó el 4-0 y el 5-0 definitivo, con el Zalamea volcado y el conjunto local armado atrás y con salidas rápidas. Pese a todo el equipo entrenado por Juanma no bajó los brazos y lo intentó hasta la extenuación en un esfuerzo encomiable, pero ya era demasiado tarde para arreglar este desaguisado.
Habrá que pensar en el próximo encuentro frente al eterno rival en su feudo. Un partido que supondría un derbi como local, pero por las circunstancias del Pera Anta se tendrá que jugar en el Valero Rojas de El Campillo.