El Día de Todos los Santos congregó en torno al Cementerio a todo tipo de gente: hombres y mujeres de fe que tienen algún familiar enterrado, jóvenes que visitan a amigos e incluso curiosos a los que les gusta acercarse para participar de la tradición.
Las visitas se han realizado escalonadamente, aunque ya, a lo largo de la semana, muchos zalameños y zalameñas han realizado sus ofrendas de una forma más intima.