La imagen recoge un momento del eclipse de Luna ayer por la madrugada; una estampa bonita junto al Sepulcro, desde donde el encuadre nos revela al conjunto Iglesia-Torre como testigos del fenómeno astronómico dentro de una atmosfera mágica. Sosiego y tranquilidad, que contrasta con los cantos de sirena de los pueblos de los alrededores que festejaban sus fiestas mayores.
Se trataba de un sábado distinto, ya que el revuelo de los sábados por la noche en las calles céntricas del pueblo había desaparecido. Muchos jóvenes se desplazaron hacia dos pueblos cercanos que se encuentran celebrando sus ferias de agosto, Riotinto y Valverde del Camino. Probablemente desde allí, algunos se dieran cuenta del fenómeno en el tumulto de la noche festiva.