martes, 1 de julio de 2008

Primer incendio del verano en la Cuenca Minera

La temporada de grandes incendios forestales se inició ayer en la Cuenca Minera, a pocos kilómetros de donde comenzara en julio de 2004 el infausto fuego de Riotinto que calcinó más de 34.000 hectáreas. El fuego se declaró sobre las seis de la tarde en el paraje conocido como Las Capellanías, junto a la Sierra de la Jabata, en término municipal de Nerva. El hecho de que las llamas y el humo se pudieran ver desde las inmediaciones de la localidad nervense llenó de inquietud a los vecinos, alarmados ya por los medios aéreos del Plan Infoca que trabajaban denodadamente contra su propagación.

El dispositivo contra incendios coordinado por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía envió al lugar del siniestro un amplio equipo formado por seis técnicos especialistas, noventa operarios, siete vehículos autobomba, tres helicópteros, un avión de coordinación , una avioneta de carga y otra de gran capacidad.

Al atardecer, las llamas proseguían su devastadora marcha en dirección a la provincia de Sevilla y ya había afectado a uno de los pinares más frondosos de la zona. Una gran arboleda que se encuentra inscrita en el catálogo de bienes protegidos de la provincia de Huelva por su importante valor medioambiental.

Los técnicos mostraban ayer tarde su inquietud por el viento, que soplaba fuerte, aunque confiaban en que el avance continuara por la noche en dirección al pantano del Jarrama, un embalse recrecido que haría de cortafuegos natural y ayudaría a mitigar el incendio sin que afectara a la vecina Sierra del Padre Caro y las vaguadas adyacentes.

Las zonas amenazadas por las llamas están formadas por cientos de hectáreas de eucaliptos, presa fácil del incendio, y los terrenos agrícolas y naranjales de Río Tinto Fruit.

Al parecer, las llamas empezaron junto a la carretera comarcal que conduce de Nerva a Sevilla por lo que la Guardia Civil se vio obligada a cortar la vía y desviar a los conductores por caminos alternativos.

Se da la circunstancia de que justo en la zona donde se inició el fuego, se habían realizado ya trabajos silvícolas importantes por parte de la Administración andaluza.