La asociación Amigos del Patrimonio procedió la semana pasada a una serie de labores de limpieza y mantenimiento en el interior del edificio más emblemático del pueblo: la Torre. Entre las principales tareas realizadas, destacaron la de la eliminación de todos los residuos generados por las palomas que habitan en el campanario y en cuartos inferiores. De esta manera, se limpiaron ambas estancias, las cuales estaban cubiertas de cagadas y cadáveres de palomas, así como se procedió a reparar las mallas rotas que protegen las ventanas y por donde las palomas entraban y después no podían salir.Un total de 8 sacos de residuos se sacaron de la zona en cuestión. Una vez terminada la limpieza, miembros de esta asociación accedieron a la zona superior del campanario donde pudieron comprobar el estado de deterioro que presenta algunos de los pináculos que coronan la Torre. Una vez allí disfrutaron de la perspectiva y realizaron varias fotos para que los lectores de “Zalamea…la otra mirada” pudieran hacerse una idea de cómo son las vistas que se contemplan desde aquel balcón privilegiado.
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