La obra de restauración del Centro de Interpretación de la Cultura Dolménica de Zalamea la Real podría finalizar en el primer semestre de este año, ya que los trabajos de acondicionamiento de este emblemático edificio van a buen ritmo, según ha podido comprobar el delegado de Cultura, Juan José Oña, en una reciente visita al mismo, durante la que estuvo acompañado del alcalde, Vicente Zarza.
La actuación, financiada íntegramente por la Consejería de Cultura, tiene un presupuesto de 109.378,06 euros, y se centra principalmente en el arreglo de la cubierta del inmueble, que presentaba problemas de goteras en distintos puntos y carecía de un sistema de impermeabilización para aislar térmicamente el interior.
Ya se ha procedido al desmonte de todas las tejas para poner un revestimiento aislante e impermeabilizante de gran acabado con instalación de pino barnizado y con tratamiento de pintura ignífuga.
El Centro de Interpretación de la Cultura Dolménica de Zalamea es un emblemático edificio de la arquitectura local inaugurado en 1904 y utilizado en sus orígenes como Mercado de Abastos.
Posteriormente, el delegado de Cultura supervisó en la aldea de El Pozuelo las actuaciones arqueológicas y de conservación que se están llevando a cabo en el conjunto dolménico de El Pozuelo. Se trata de una intervención patrimonial que lleva a cabo por la Consejería de Cultura con una inversión de 188.805 euros y que tiene como objetivo contribuir a la puesta en valor de los dólmenes 3 y 4 del Grupo de los Llanetes, dentro de este conjunto. Ésta se centra en la recuperación y preservación material de estos dos monumentos megalíticos, mediante las actuaciones arqueológicas y obras de conservación necesarias. Las actuaciones en los dólmenes 3 y 4 se centran en la conservación de estos monumentos megalíticos, aplicándose diversos procedimientos técnicos para detener los mecanismos de alteración e impedir que surjan nuevos agentes de deterioro.
La idea principal de la actuación es garantizar la permanencia material de estos bienes patrimoniales, favoreciendo a su preservación futura y determinando las tareas de mantenimiento oportunas, con los objetivos básicos de prevenir y evitar que estas construcciones vuelvan a deteriorarse.