Un nuevo concepto -el turismo inteligente- centró la tercera y última jornada profesional de Huelva en Fitur.
La joven empresa Fieldwork Riotinto se presentó en el estand onubense, dando a conocer cómo quienes usan sus servicios vuelven de la comarca minera tras tocar las aguas del Río Tinto, conocer la mina, recorrer el legado británico e impregnarse de la historia y cultura que ofrece Minas de Riotinto, "una referencia que se conoce en todo el mundo".
Así lo procuran Juan Manuel Gemio y Gregorio Gemio, dos de los cuatro artífices de la empresa surgida en 2013 para "mostrar la Cuenca de Riotinto de una manera distinta, más moderna, más profesional, especializada (sus artífices son geólogos e historiadores) y personalizada", ya que el visitante previamente puede contactar con la empresa para elegir qué visitar y cómo hacerlo. Es el protagonista y también, si lo desea, el director de la visita programada.
Tras optar a los Premios al Mejor Producto de Turismo Activo organizados por la revista especializada Aire libre con la ruta del Río Tinto -una actividad que aúna geoturismo, experiencias e historia en torno a un paisaje único con el objetivo final es responder a la pregunta ¿qué nos cuenta el río?-, Fieldwork desembarcó en Ifema con un buen puñado de rutas diarias de hora y media de duración por la zona minera, el legado británico o los dólmenes, entre otras. No en vano, la empresa se centra en "todo lo referente a la Cuenca Minera; por ejemplo, el legado que hay en Huelva capital". Además, los fines de semana también ofrece itinerarios de senderismo.
"Queremos que cada visita sea muy especial y las rutas son muy participativas. Empezamos, por ejemplo, con una pregunta cuya respuesta, al final, será dada por los visitantes, que sacan sus propias conclusiones. Pueden analizar, por ejemplo, el agua del río o comparar, ayudándose por una lupa, minerales en la ruta minera", explicaron.
Los miembros de Fieldwork -que asesoran al Museo del Pueblo de Riotinto, una iniciativa que pretende recuperar el pueblo originario y desconocido para las nuevas generaciones- aseguraron que los visitantes "se sorprenden al conocer dónde estaba la localidad" y explicaron, además, que tienen un fuerte interés en ceder el protagonismo a esas personas que realmente han modificado el paisaje: "La historia de los británicos, de los directores generales es muy conocida, pero también damos voz a mineros y mineras que con sus picos, palas y martillos han hecho de las minas de Riotinto un lugar mágico. Todo el que viene se marcha comentando que es un lugar especial, con magia, gracias a esas personas que merecen también ser conocidas".