miércoles, 4 de febrero de 2015

Emed recuerda que el proyecto cuenta con todas las garantías al estar aprobado

La promotora considera que los trámites para obtener los permisos derivados del plan no deberían retrasar la reapertura.

Llamada a la calma en medio de un cruce de acusaciones políticas entre PP y PSOE con la reapertura de la mina de Riotinto como caballo de batalla preelectoral. Las insistentes declaraciones de representantes políticos e institucionales del Partido Popular, urgiendo a Emed y a la Junta a culminar los últimos trámites administrativos para la reapertura del yacimiento de cobre, han provocado que la promotora rompa su silencio.

En declaraciones a Huelva Información, Alberto Lavandeira, consejero delegado de Emed Tartessus y de Emed Mining, aseguró ayer que en la empresa están "encantados" con la predisposición y afán de colaboración que "ahora" manifiesta el PP para agilizar los trámites finales que se derivan de la reciente aprobación del proyecto de explotación por parte de la Administración autonómica, si bien recordó que, según el ordenamiento jurídico actual, "la aprobación del proyecto significa que las garantías legales, técnicas y ambientales ya han quedado demostradas ante el órgano sustantivo en la actividad minera, que es la Consejería de Economía".

Después de que el presidente provincial del PP, Manuel Andrés González, asegurase el pasado lunes que el proyecto está a la espera de que la empresa remita al Ayuntamiento de Minas de Riotinto "la solicitud de la licencia de actividad con todas las garantías legales y medioambientales", Lavandeira dejó claro que el Ayuntamiento de Riotinto "puede tener la seguridad de que la actividad que se va a reiniciar contará con todas las garantías necesarias".

No en vano, recordó que, una vez que el proyecto minero ha sido aprobado por el organismo competente que regula la industria minera, la empresa "está ya en posición de obtener todas aquellas licencias que derivan de ese permiso clave". Entre estas, según precisó, se encuentra la del uso de explosivos mencionada por el PP, al igual que "multitud de otras relacionadas con seguridad, uso de equipos móviles, uso de agua, conexiones eléctricas, radiofrecuencia, etcétera". Todo ello culminará, a juicio del responsable, con la licencia para reiniciar los trabajos de producción, que se llevarán a cabo en las instalaciones que funcionaron durante años y que desde hace meses son reparadas por la propietaria de las instalaciones.

Los procedimiento para obtener las licencias derivadas de la aprobación del plan minero, ya sean municipales o de otros estamentos, están "perfectamente reglados", por lo que, a juicio de Emed, su tramitación no debería generar mayores retrasos a la puesta en marcha del proyecto.

Además, Lavandeira insistió en que el proyecto, y más específicamente la puesta en marcha de la primera fase, es simplemente un reinicio de las actividades llevadas a cabo anteriormente en dichas instalaciones, de modo que "no se entendería un parón en su avance debido a un retraso del otorgamiento de las licencias oportunas". En este sentido, destacó que, aunque en estos años la producción ha estado en suspenso, "las actividades de mantenimiento y las responsabilidades ligadas al mismo nunca fueron interrumpidas".

También recordó el consejero delegado de Emed Tartessus y Emed Mining que todas las labores de reparación de las instalaciones que estaban deterioradas han contado, y siguen contando, con todas las licencias de obra preceptivas emitidas por los ayuntamientos implicados: "Es como si un hotel de la costa cierra unos meses en invierno porque el descenso de clientela no le alcanza para mantenerse abierto todo el año, o por un parón técnico debido a una remodelación, y vuelve a abrir para el siguiente verano", relató. De esta forma, adujo que "vamos a hacer lo mismo que se hacía antes con las mismas instalaciones tras haber sido modernizadas".

Las mejoras que se llevan a cabo en la mina siguen "a buen ritmo". Esto es posible, según señaló Lavandeira, "gracias al esfuerzo inversor de nuestros socios y al compromiso de los más de 400 trabajadores, en su mayoría empleados de la Cuenca Minera, que trabajan para que la puesta en marcha sea una realidad lo antes posible".

Las mejoras se basan en la reparación y acondicionamiento de instalaciones existentes y, según reiteró el consejero delegado, las obras han contado con las licencias otorgadas por los ayuntamientos correspondientes.

La constante relación con las administraciones locales está siendo presidida, a su juicio, por "un clima de colaboración total". Al respecto, mostró su agradecimiento y confianza en que este clima marcará la tónica "a lo largo de los muchos años de trabajo y
generación de riqueza que nos quedan por delante".