Subía la media-cuesta del túnel, porque ahora con el progreso se ha quedado convertida en eso, una media-cuesta. Si ya sé que se han quitado muchas curvas innecesarias hoy, pero ¿y más allá no hay unas SEÑORAS curvas (Los antiguos DÓLMENES, EL CRUCE DE EL POZUELO….), bueno vamos a dejar esto y vamos a lo que vamos. Decía que subía la antes mentada media-cuesta y me suena el teléfono; aunque llevaba “el manos libres” me paré por lo extraño que sonaba. Miro el número y efectivamente… era muy extraño… ¡un número de dos cifras! Descolgué, pregunté por quién era y suena una voz desconocida pero muy hueca.
¡Hola… señor Maestrescuela!
Me dije ¡ah! ya sé quién es este señor, pero ¿por el móvil? Qué cosa más extraña. Era D. Lope. ¿D. Lope?
¿Qué desea? ¿Cómo usted con un móvil?
Sí señor Maestrescuela, le hablo desde el más allá….
Desde qué más allá,…. hacia Valverde o hacia Zalamea…
Hacia ninguno de los dos, véngase por aquí y le aclaro su perplejidad.
Y allá que me fui, hacia lo de mi amigo Antonio, el Totiste. Llegué, y allí estaba D. Lope con su “juguetito” en las manos.
Buenas tardes Maestrescuela.
Buenas tardes D. Lope. ¿Me quiere contar qué pasa con el móvil?
¿Qué móvil? Esto es un celular… me lo ha vendido un señor del Perú, que pasó por aquí hace unos días; después de que pasaran un montón de gentes, entre los que iban personas con las que le he visto algunos días en el pueblo. Entre ellos uno que se parecía a vos, y con el que estuvo una tarde-noche en lo que antes se llamaba “las casetas de los moros” y ahora dólmenes. Algunos de ellos llevaban una cosa como esta y hablaban solos diciendo algo de un iluminado, ¿es que ahora vuelve a haber Inquisición y Santa Hermandad?
Bueno D. Lope, esto es muy largo de explicar… pero algo de ello parece que vuelve a haber, porque el que se encasquilla, o habla diciendo la verdad, pues… como que…. bueno pues lo crucifican sin averiguar las razones si son ciertas o no. Ese señor que hablaba con otro, como usted ha hecho conmigo hace un rato, le estaría contando lo que había ocurrido en la visita a Los Dólmenes… y ya está…
Sí, pero usted se calla lo que se dijo sobre la construcción de unos “chozos”, sobre lo que habían costado y en qué iba a quedar toda la parafernalia que.….
Bueno D. Lope, pare, yo no estuve allí, ni en la charla que se dio antes de la visita…. Por eso no le puedo decir nada referente a ello, ya que podría dar lugar a mala interpretación por mi parte…. y la de otros señores que están con la caña puesta a la que salta; pero no dude que me enteraré de cómo fue aquello y le daré cumplida información…. Porque a mí ni La Santa Hermandad ni la moderna Inquisición me impresionan en nada. Yo voy por libre,…. hasta hoy. Y volviendo al celular ¿qué ha pasado?
Hombre… como vi a ese señor con la cajita pegada en la oreja y raja que raja pues me fui a ver a San Pedro, que es muy dado a las nuevas tecnologías, no sé si sabe que quiere poner un portero automático para no tener que estar haciendo el camino cada vez que llega alguien nuevo para entrar, y le propuse que nos facilitara un medio como el de los vivos… para comunicarnos con vosotros… Después de mucho hablar que si sí, que si no, accedió a que algunos lo tuviéramos…., pero sin abusar, y por ello yo tengo uno, y nada más.
Muy bien D. Lope, haga buen uso de su celular, que usted no sabe los dineros que vale hablar por él, hasta otra.
Pastor, Noviembre del 2011.