La investigación la iniciaron guardias civiles de Zalamea la Real, , que sorprendieron a una persona en posesión del pequeño animal, el cual resultó ser un ejemplar de "macaco sylvanus", comúnmente denominado "mono de Gibraltar".
Por ello fue denunciado por una supuesta infracción a la Ley de Reprensión del Contrabando, por introducir ilegalmente al animal en España.
Según manifestó el propietario, el animal se introdujo en el maletero de su vehículo, durante una visita a Gibraltar, sin que él se diera cuenta de la maniobra del pequeño mono.
En conocimiento de estos hechos, el Equipo del Seprona, se desplazó hasta el domicilio del propietario, en la localidad de El Campillo, donde los agentes intervinieron al animal, trasladándolo posteriormente en calidad de depósito a la Reserva Natural del Castillo de las Guardas, donde ha quedado a disposición del Administrador Principal de Aduanas e Impuestos Especiales de Huelva.