“El Rey de la Amazonia”, es una obra con un buen resultado, entrañable y con suma calidad interpretativa de sus jóvenes actores que, además de un cuidadoso manejo de las máscaras, matizan a la perfección un texto entendible y placentero escuchar. Pausas, silencios, luces, sombras y cuerpos curtiéndose en el escenario, un cúmulo de sensaciones que no dejarán indeferente a las personas que quieran acudir al teatro zalameño. Basado en un texto de Jesús Domínguez, cuenta la historia del Rey de la Amazonia, Fernando José I, que vive en el exilio y que por azares del destino termina alojándose en una pensión en Sevilla. Con lenguaje inteligente, la obra habla de Libertad y deja entrever un alegato en contra de un mundo condenado a desaparecer y que es consumido por un sistema imperialista que lo acapara todo. Bien por esta joven compañía que entiende el Teatro como un camino de riesgo y que apuesta por andar sobre la cuerda floja de la experimentación.
