El duelo cainita entre las dos escuadras se resolvió en el último minuto del descuento con un remate glorioso de Alex a bocajarro. Los de Juanma, tras ponerse por delante en la primera mitad, carecieron de entrega durante buena parte de la segunda mitad y el Riotinto consiguió dar la vuelta al marcador.
El esperado duelo entre el Zalamea CF y el Riotinto Balompié no dejó indiferente a nadie, tras una primera parte tediosa y carente de ocasiones de gol, el derbi estalló en la segunda parte con goles, emoción y polémica. El equipo zalameño saltó al campo con ganas de agradar a su público, pero pronto se encontró con un conjunto bien plantado y con oficio. El equipo rojillo no podía hacerse con el control en el centro del campo y, salvo jugadas a balón parado, no llegaba con peligro al marco defendido por el riotinteño Álvaro. El equipo minero había venido con la misión de frenar el caudal ofensivo del Zalamea, y a base de marcajes pegajosos sobre Muñiz y Javi fueron mermando la moral de un equipo que, por momentos, se mostró ansioso.
El encuentro se hizo soporífero, más aún, cuando el colegiado se decidió por interrumpir el juego señalando faltas por cualquier tipo de contacto.
A contabilizar una única ocasión clara para el Zalamea, pero Pirulo en posición franca para el disparo dentro del área, dudó y no supo engancharla. Cuando todo hacía esperar que el marcador llegara al descanso con el 0-0 de salida, llegó el 1-0 materializado por Javi en el 44 de partido. El jugador riotinteño, tras controlar un balón en el interior del área supo revolverse para conectar un chut potente al fondo de las mallas. Con la alegría del gol favorable para la parroquia zalameña se llegó al descanso.
Tras el descanso, el Riotinto saltó al campo con más mordiente, los jugadores foráneos se impusieron claramente en los balones divididos, y se adueñaron del centro del campo a base de lucha y entrega. Pese a todo, Johnny no tenía mucho trabajo y la defensa zalameña resolvía con solvencia cualquier acercamiento del equipo minero. El gol del empate llegó en una jugada desafortunada donde el balón, tras tocar en el banderín de córner, cogió desprevenida a la defensa local; finalmente el esférico llegó a los pies de un punta riotinteño para alojarla en la red. 1-1 en el marcador y desconcierto local.
Sin sobreponerse al empate, el Riotinto, tras fallar Pablo en un control, monta un contragolpe y anotan el 1-2 con la defensa rojilla vendida. Habían pasado 10 minutos del empate y el Riotinto celebraba por todo lo alto la remontada.
Faltaban 20 minutos para la conclusión y a partir de este momento llegaron las mejores ocasiones para el Zalamea, que se vio espoleado en su orgullo y comenzó a tener los mejores minutos de juego. Jairo en un pase interior se planta solo delante del portero, pero el cancerbero riotinteño interfiere el esférico para mandarlo a córner. En estos minutos el Zalamea se crece y las ocasiones se multiplican. A destacar un cabezazo de Muñiz que salva el meta in extremis, una internada de Portu que, tras salvar al portero no llega a rematar, y la doble ocasión de Muñiz cuando tras doble remate estrella el balón en el palo. Desaliento local y pesadumbre en el banquillo local, que veía como se le escapaba el partido.
Pero tenía que llegar, y llegó. 82 de partido. En este momento me gustaría hacer una parada para hablar de Jairo (qué tío), tras pelear durante todo el encuentro, sufrir entradas fuertes, la pesadumbre del ambiente, la caída de la tarde y sus 16 años; hace la jugada del partido para zafarse de tres contrincantes y mandarle el balón en papel de regalo a Portu en el segundo palo; Portu en un gesto de compañerismo deja el esférico en el aire para que Muñiz, nacido en la “Cuna del Fútbol” logre el 2-2. A falta de 8 minutos más el descuento, había tiempo para la épica.
Haciendo honores a un derbi, el encuentro se vuelve brusco, los jugadores, nerviosos por el marcador, se emplean a fondo y el colegiado se ve obligado a mostrar varias cartulinas. Con 5 minutos de descuento se llega al 90 de encuentro.
El Zalamea estaba dispuesto a plantar batalla hasta el final, se veía superior y jugaba en casa. En estos minutos se hizo sentir, y de qué manera el aliento del Frente Pardo, que pese al fío no paró de animar a los suyos en pro de la victoria.
Y en el 94 de partido córner a favor del Zalamea. En el saque de esquina, una vez más Jairo, para ponerla plana en el punto de penalti. El esférico tras una serie de rechaces llega al pecho de Alex, que la baja y la manda a la gloria para felicidad de un equipo y su pueblo (3-2).
El esperado duelo entre el Zalamea CF y el Riotinto Balompié no dejó indiferente a nadie, tras una primera parte tediosa y carente de ocasiones de gol, el derbi estalló en la segunda parte con goles, emoción y polémica. El equipo zalameño saltó al campo con ganas de agradar a su público, pero pronto se encontró con un conjunto bien plantado y con oficio. El equipo rojillo no podía hacerse con el control en el centro del campo y, salvo jugadas a balón parado, no llegaba con peligro al marco defendido por el riotinteño Álvaro. El equipo minero había venido con la misión de frenar el caudal ofensivo del Zalamea, y a base de marcajes pegajosos sobre Muñiz y Javi fueron mermando la moral de un equipo que, por momentos, se mostró ansioso.
El encuentro se hizo soporífero, más aún, cuando el colegiado se decidió por interrumpir el juego señalando faltas por cualquier tipo de contacto.
A contabilizar una única ocasión clara para el Zalamea, pero Pirulo en posición franca para el disparo dentro del área, dudó y no supo engancharla. Cuando todo hacía esperar que el marcador llegara al descanso con el 0-0 de salida, llegó el 1-0 materializado por Javi en el 44 de partido. El jugador riotinteño, tras controlar un balón en el interior del área supo revolverse para conectar un chut potente al fondo de las mallas. Con la alegría del gol favorable para la parroquia zalameña se llegó al descanso.
Tras el descanso, el Riotinto saltó al campo con más mordiente, los jugadores foráneos se impusieron claramente en los balones divididos, y se adueñaron del centro del campo a base de lucha y entrega. Pese a todo, Johnny no tenía mucho trabajo y la defensa zalameña resolvía con solvencia cualquier acercamiento del equipo minero. El gol del empate llegó en una jugada desafortunada donde el balón, tras tocar en el banderín de córner, cogió desprevenida a la defensa local; finalmente el esférico llegó a los pies de un punta riotinteño para alojarla en la red. 1-1 en el marcador y desconcierto local.
Sin sobreponerse al empate, el Riotinto, tras fallar Pablo en un control, monta un contragolpe y anotan el 1-2 con la defensa rojilla vendida. Habían pasado 10 minutos del empate y el Riotinto celebraba por todo lo alto la remontada.
Faltaban 20 minutos para la conclusión y a partir de este momento llegaron las mejores ocasiones para el Zalamea, que se vio espoleado en su orgullo y comenzó a tener los mejores minutos de juego. Jairo en un pase interior se planta solo delante del portero, pero el cancerbero riotinteño interfiere el esférico para mandarlo a córner. En estos minutos el Zalamea se crece y las ocasiones se multiplican. A destacar un cabezazo de Muñiz que salva el meta in extremis, una internada de Portu que, tras salvar al portero no llega a rematar, y la doble ocasión de Muñiz cuando tras doble remate estrella el balón en el palo. Desaliento local y pesadumbre en el banquillo local, que veía como se le escapaba el partido.
Pero tenía que llegar, y llegó. 82 de partido. En este momento me gustaría hacer una parada para hablar de Jairo (qué tío), tras pelear durante todo el encuentro, sufrir entradas fuertes, la pesadumbre del ambiente, la caída de la tarde y sus 16 años; hace la jugada del partido para zafarse de tres contrincantes y mandarle el balón en papel de regalo a Portu en el segundo palo; Portu en un gesto de compañerismo deja el esférico en el aire para que Muñiz, nacido en la “Cuna del Fútbol” logre el 2-2. A falta de 8 minutos más el descuento, había tiempo para la épica.
Haciendo honores a un derbi, el encuentro se vuelve brusco, los jugadores, nerviosos por el marcador, se emplean a fondo y el colegiado se ve obligado a mostrar varias cartulinas. Con 5 minutos de descuento se llega al 90 de encuentro.
El Zalamea estaba dispuesto a plantar batalla hasta el final, se veía superior y jugaba en casa. En estos minutos se hizo sentir, y de qué manera el aliento del Frente Pardo, que pese al fío no paró de animar a los suyos en pro de la victoria.
Y en el 94 de partido córner a favor del Zalamea. En el saque de esquina, una vez más Jairo, para ponerla plana en el punto de penalti. El esférico tras una serie de rechaces llega al pecho de Alex, que la baja y la manda a la gloria para felicidad de un equipo y su pueblo (3-2).