La asociación Cistus jara transita por la senda del tiempo, aproximándose en el calendario a la época del medievo. Un camino, que desde hace meses, viene recorriendo y que el próximo fin de semana, culminará en una Zalamea disfrazada de la época. Una regresión en el tiempo que desde hace dos años, vienen realizando con gran éxito esta asociación, dotando al calendario festivo zalameño de una nueva cita que desde su inauguración, se ha convertido en un encuentro ineludible para cualquier zalameño.
Ya todo se encuentra organizado y preparado para que a partir del miércoles ( este año se incluyen una serie de conferencias relativas al tema en los dos días anteriores al fin de semana festivo) Zalamea se encuentre inmersa en ese ambiente mágico de recreación de la época. Una zalamea musulmana y cristiana a la vez.
Y como muestra de esta creciente actividad, nos encontramos a un grupo de unas diez mujeres zalameñas, que tienen entre sus manos la responsabilidad de vestir a Zalamea. Entre patrones y retazos de tela, culminan durante este último fin de semana, los últimos trajes de las personas que se han decidido en participar en las jornadas, bajo el papel de cristiano o musulmán.
Nos comentan, que ya está toda la ropa prácticamente preparada, aunque aún quedan ciertos cabos por atar, por lo que piensan que todavía se alargarán en el tiempo, las jornadas de costura.
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Casi 110 personas han pasado este año, por la sede de Cistus Jara, para las pruebas de vestuario, coincidiendo en muchos casos, con anteriores participantes, que este año, han tomado la decisión de cambiar su traje de ediciones precedentes. La tendencia musulmana domina en estas jornadas, siendo las mujeres las que más se decantan por esta opción, quedando los hombres, que participan en menor número, abonados en su mayoría al traje cristiano. Entre risas y buen ambiente, discurre el gran trabajo de estas costureras, que hacen que las jornadas luzcan en todo su esplendor, todo ello unido a una población que ha apostado firmemente con su participación, en hacer que esta fiesta se perpetue en el calendario de ocio del verano.