lunes, 14 de febrero de 2011

“Emed es sólo Riotinto y vive de su nombre en la minería mundial”

Entrevista a Carlos Estévez concedida a Andalucía Información y realizada por Carmen del Toro:

Su nombre siempre está vinculado a Riotinto, a sus minas, y al parecer también al presente y al futuro de la reapertura que pretende llevar a cabo Emed Tartessus. Culpable o solución del problema, la opinión de Carlos Estévez, ex director general de MRT, merece la pena exponerla.

¿Se ha ofrecido “por dinero” a resolver los problemas de Minas de Riotinto?

–Eso es una solemne tontería propia de la enfermiza imaginación del señor Adams. Soy un profesional con un amplio conocimiento del proyecto Riotinto y por supuesto me considero capaz de colaborar con cualquier tercero en la resolución de la compleja situación que se ha creado. Emed lo sabe desde que llegó y si ha elegido el camino de la confrontación, ellos sabrán por qué. Yo, lo intuyo.

¿Y cuánto costaría su colaboración?

–La pregunta no tiene respuesta. Un profesional define sus honorarios en función del alcance de su prestación y hoy por hoy desconozco ese alcance.

A su entender, ¿cuál sería la solución?

–No puede ser parcial, tiene que ser global y satisfactoria para todas las partes y permítame que por deferencia a esas partes y por el bien del acuerdo, si alguna vez es posible, no le cuente mis opiniones, que inmediatamente serían utilizadas malignamente por Emed en contra de todos. Sí quiero sacar un poco la cara por quien parece el segundo malo de la película: la Junta, para la que el proceso de cierre de la minería fue muy traumático y muy costoso. Se abordó de forma equivocada, pero con determinación y un resultado socialmente más que aceptable. Es lógico que mire con lupa cualquier proyecto de reapertura y exija una solvencia técnica y económica que Emed no cumple. Cada vez que la Junta pide alguna actuación, Emed siempre pone excusas que en el fondo esconden una debilidad financiera preocupante.

¿Ve viable el proyecto que plantea Emed?

–Su proyecto está basado en el que Mantesur presentó en su día y en la operación que se hacía en los 90, basado en los resultados de un excelente equipo de 500 trabajadores y técnicos experimentado y conocedor del medio que tuve el honor de dirigir. Ese proyecto es inalcanzable si no se cuenta con ese equipo y si se sustituye por un grupo de imberbes, en su mayoría extranjeros, sin ningún conocimiento de la realidad operativa de Riotinto están abocados al desastre. Con el equipo actual dudo que sean capaces de poner Riotinto en marcha y de sacar una sola tonelada de concentrado comercialmente vendible. En el fondo Emed es una empresa sin actividad minera, actual ni previa, con unos directivos cuyo principal mérito es quemar una mina de carbón por razones tan oscuras como el propio carbón y que, según algunos de sus colaboradores, tuvieron que salir corriendo de Australia. Emed es sólo Riotinto y vive de su importante nombre en la minería mundial mientras que los mercados no se den cuenta de la gran mentira que hay detrás...


Y si la solución es global, ¿se cree capaz de conseguir aunar voluntades?

– La Cuenca minera está habitada por gente fantástica, luchadora, que cree en los recursos mineros que contiene su subsuelo. Es obvio que entre todos la mina se puede y se debe reabrir, pero siempre que al frente haya una empresa con cara y ojos, solvencia técnica y económica y un grupo de profesionales españoles conocedores de la Faja Pirítica y de los retos que un proyecto como este plantea. Y esa empresa ni es Emed ni será nunca Emed, que tampoco cuenta con los profesionales imprescindibles.

No me ha contestado, ¿sería capaz?

–Nunca me han asustado los retos y volver a poner en marcha Riotinto resultaría un reto apasionante. Pero tendría que contar con un equipo tan bueno como el que tuve hace 15 años y con el apoyo de la sociedad de la Cuenca. Sin ellos, la puesta en marcha es imposible.

Emed asegura que tiene interpuestas varias querellas contra usted...

–Nunca en la vida, hasta llegar a Riotinto había tenido relación con la Justicia como imputado. Primero CCOO, absuelto o archivado, después Marc Rich y Emed decidieron brearnos a querellas catalanas para paralizar los procedimientos mercantiles. Todas basadas en acusaciones falsas y así se demostrará si progresan. Más preocupado estaría yo por los procedimientos abiertos en Valverde por delito ecológico contra Emed por los vertidos de aguas ácidas a cauce publico de más de 4 millones de metros cúbicos en el invierno pasado y de más de 2 millones en el actual, que han dado lugar a un expediente de la Agencia del Agua con multa de más de 1,6 millones. Y aún más preocupado por la situación de las presas de estériles, que no han estado peor en sus más de 60 años de existencia: hasta hace dos años estaban gestionadas por profesionales y ahora por aprietatuercas sin los conocimientos mínimos para una adecuada gestión.

Usted estuvo vinculado a Emed cuando aterrizó en la Cuenca, ¿qué ocurrió?

–Asesoraba a Mantesur y Emed tenía el aval de Oxiana, pero el proyecto quedó en manos de un equipo de directivos incapaz e inexperto que decidió prescindir de todo lo que significara el pasado, especialmente tras su burda manipulación del cuadro de reservas y la progresiva falta de atención al mantenimiento de instalaciones y presas, a pesar de nuestras recomendaciones, de donde se derivan los problemas actuales. Todos los ataques de Emed sólo pretenden desacreditarnos porque sabemos de sus mentiras, de sus engaños y de su incapacidad profesional para llevar adelante un reto como este. Desde aquí desafío a Emed a debatir en un foro cualificado (el Colegio de Minas) su proyecto y sus mentiras acerca del incremento de reservas y de la capacidad productiva, puros blufs que merecen un debate profesional para demostrar hasta donde llega el engaño.

La pregunta del millón, ¿es cierto que usted maneja todo lo que rodea a Minas de Riotinto o sólo está enterado de todo?

–No soy Dios y, por lo tanto, no manipulo las conciencias, pero sí tengo un conocimiento amplio de la realidad de Riotinto y deduzco que lo mejor para la Cuenca es que Emed se vaya y vengan otros con capacidad técnica y económica. El interés, sin duda, existe pero Emed es un estorbo.