miércoles, 7 de febrero de 2007

Kilómetro cero

La próxima semana tendrán lugar en los centros de educación de Zalamea la Real unas charlas didácticas sobre la Educación Vial, dirigida para los más pequeños y los jóvenes. El martes 13 los instructores estarán en el Instituto Nuevo Milenio, y al día siguiente se trasladarán al Colegio Público San Vicente Mártir.



La educación vial infantil es sin duda la gran asignatura pendiente en nuestro país en materia de seguridad en las carreteras. Y es que en nuestro sistema educativo no existe en ningún curso una asignatura sobre este tema.

Las últimas iniciativas del Gobierno: instalación de radares, carné por puntos y campañas publicitarias, han incidido en la última etapa de la siniestralidad, los accidentes. Sin embargo, no se está actuando en la etapa previa de formación de los ciudadanos en seguridad vial.

Como en otros campos, tenemos que mirar a los países del norte de Europa, Suecia por ejemplo, como modelo para nuestra sociedad. En este país, llevan más de 30 años de experiencia en formación vial de los niños. Durante algún momento de su etapa escolar, los más jóvenes reciben educación vial. El año pasado, el responsable de Tráfico de este país nórdico, en una rueda de prensa con su homólogo español, habló de la fuerte concienciación de la sociedad sueca en esta materia. Asimismo, aseguró que la educación vial da sus frutos a largo plazo y que los más jóvenes interiorizan mejor las normas de conducta en general cuanto más pequeños son.

Muchos padres piensan que con 5 años, aún son demasiado pequeños para aprender, pero la realidad es distinta, hasta los 7 años los niños son especialmente receptivos a la hora de aprender cosas nuevas, y la seguridad vial es un tema tan importante, que cuanto antes lo aprendan mejor. Igual que los enseñamos les peligros de entrar sin protección en la piscina, debemos enseñarles los peligros de la vía urbana. Son pequeños para aprender normas complicadas de educación vial, pero no para asimilar unas nociones básicas que les serán muy útiles, como por ejemplo, reconocer su entorno habitual, su domicilio, su colegio, el domicilio de los familiares más cercanos, etc. los monitores que acudirán al colegio para impartir la clase de educación vial, les enseñarán las normas básicas de circulación, los colores y el significado de ellos en un semáforo, la utilidad de un paso de cebra, a que hay que mirar a ambos lados antes de cruzar, les explicará que tienen que ir por la calle caminando, sin correr ni saltar. Algo más complicado, pero que por las formas de las señales y los dibujos podrán aprender también, es a diferenciar las distintas normas que indican peligro, prohibición, obligación… Esta enseñanza la aprenden mediante juegos y en ocasiones, para reforzar lo aprendido, dan un paseo por los alrededores del colegio para aplicarlo sobre el terreno.