Diego Moriana
“El Turronero”
En el día de hoy se ha marchado Diego “El Turronero”, entrañable persona que cada año nos visita con toda su familia en Feria. A Diego lo conoce todo el mundo porque tras 62 años viniendo ininterrumpidamente ha calado como un vecino más y cada año se le espera con los brazos abiertos. A significar, por poner un ejemplo del carisma que despierta, que en la vecina localidad de El Campillo lo hicieron Hijo Predilecto por petición popular hace 2 años.
1 ¿Cuántos años llevas viniendo a Zalamea la Real? ¿Recuerdas las primeras ferias o alguna anécdota?
62 años llevo viniendo a la Feria de Zalamea la Real con mi familia; desde que nací, ya que con 8 años paseaba por la feria con un carrito y me paraba en un rinconcito junto a la torre para cuando pasaran la gente que iban a los toros. Cuando terminaba la feria me iba al Mercado de Abastos a vender con mi puestecito, y mientras tanto mi padre, mi madre y mi hermano se quedaban en el puesto grande en el mismo sitio donde está hoy en día.
Por nombrar o citar alguna anécdota, decir que la gente cuando salía de los toros y subía para arriba, nos compraba el turrón y se iban a coger el tren para irse a sus pueblos. También comentar que todas las personas que pasan por el lado del puesto del turrón nos saludan tantas veces como pasen y siempre se dejan caer algún comentario para Diego “El Turronero”. Por supuesto siempre bueno. En cuanto a la juventud, decir que nos trata y respeta como si fuéramos uno de ellos.
2 ¿Cómo has visto la evolución de la feria zalameña en estos años?
Bastante bien, aunque diferente puesto que los tiempos cambian. Por tanto hay que adecuar la forma de vender los artículos, pero la esencia es la misma.
La Feria de Zalamea me gusta y es especial, pues por ejemplo, ahora se compra para todos, es decir, una persona compra para los enfermos y viudas que están en casa sin poder salir, o para las personas que están en la residencia de ancianos…esto sólo lo vivo en Zalamea.
Tampoco tenemos problemas con la gente en cuanto a que se lleven las cosas como en otros sitios que tenemos que estar vigilando. Aquí podemos estar comiendo tranquilamente, que ellos mismos cogen lo que le guste, nos lo dicen y vienen a pagarnos sin tenernos que preocupar por nada.
3 ¿Cómo te iniciaste en este negocio?
A través de mis padres, por herencia familiar. En verano íbamos con el puesto del turrón de feria en feria y en invierno yo trabajaba en una platería de orfebre en Córdoba.
4 Hasta finales de septiembre permaneces en Zalamea y ¿luego…?
Después de la Feria de Zalamea nos vamos a la de Cartaya, Gibraleón, Trigueros y para acabar en la Feria de Niebla.
Después nos vamos a Córdoba, donde vivimos. Allí hacemos las Navidades pero sin caseta, por las calles. Ya en Córdoba nos quedamos hasta el mes de abril, que volvemos a salir otra vez.
Un abrazo muy fuerte a todos
Os quiero…