Por Francisco García Monsó
Barcelona Enero de 2013
“Aunque ya te comuniqué a través del teléfono mi desacuerdo con el resultado final sobre la impresión, presentación y difusión del libro “Léxico Autóctono de Zalamea la Real” y del cual me considero parte. Hoy quiero hacerlo a través de los medios para que el lector del libro y las personas que acudieron a su presentación, tengan conocimiento de cuál ha sido mi aportación al libro y de lo que quedó por hacer.
En primer lugar quiero informar a los lectores que una parte del libro donde constan la mayoría de las palabras verdaderamente autóctonas y esa docena de juegos infantiles, de cartas o de billar (con sus posibles errores) comienzo a escribirlo al comienzo de los años setenta recién llegado a Barcelona. Posteriormente pasé todo a soporte informático y se comenzó a publicar en “La Voz de Zalamea” en la década de los noventa, donde pasado un tiempo supongo que por extravió del diskette, dejó de publicarse.
Te recuerdo que en una de esas mañanas de verano en tertulia en Educación y Descanso y preguntado sobre lo que fue de las palabras que en su día se publicaron en “La Voz de Zalamea”, te dije que te las enviaba a través del correo de Adriano, lo cual hice al llegar a Barcelona.
En un principio y tras tu llamada pidiéndome autorización para publicarlo ya que lo habías estado leyendo con Vicente y Adriano, creí que lo haríamos los cuatro y me pareció estupendo ya que de esta manera podríamos enriquecer las definiciones, hacer una criba de aquellas que no fuesen apropiadas para lo que queríamos que fuese el libro, pero sobre todo para poder darle un toque femenino que le faltaba como son las labores propias de Sras., como bolillos, bordados etc. y que por estar vosotros viviendo en el entorno os sería mucho más fácil documentaros sobre ello. Ignoro los motivos pero al llegar a Zalamea me comunicas que el libro lo haríamos nosotros dos solos y me entregaste un montón de folios en los que estaban todas mis notas más muchas palabras añadidas por ti. Tras una primera ojeada te digo que hay mucho para mejorar y muchas palabras para sacar, pero tú me respondes que si lo hacemos el libro quedará muy escueto y que cuantas más palabras haya mejor, no acabo de verlo muy claro y quedamos que me lo llevaré para Barcelona donde lo revisaré y te haré llegar mi opinión mediante correo electrónico, a lo que asientes estar de acuerdo, pero me pides que lo haga a través del e-mail de Carmelo Lancha. Una vez revisado, lo hago reseñándote algunos errores de transcripción los cuales he podido comprobaren el libro que fueron rectificados, como también lo fue el cambio mejorado en las definiciones de una cincuentena de palabras y la incorporación de una decena de nuevas, sin embargo sí que me ha sorprendido ver que ninguna de las palabras que sugerí que debían sacarse del libro por considerar que no eran propias para el estilo de este libro, se ha hecho y se han puesto como por ejemplo Barriga, Brasas, Buñuelo, Cabaña, Cascabeles y así hasta las más de cuarenta que sugerí sacar.
En primavera me dijiste en Zalamea que el coste era muy elevado y que por ahora quedaba parada su impresión, pero al volver en verano me comunicaste que finalmente habías decidido publicarlo y donar los beneficios de la venta a Manos Unidas, lo cual me pareció estupendo.
Esperé que me llegase un borrador antes de imprimir pero pasó el tiempo y me encontré con la sorpresa de que me llamaste para decirme que está impreso y que quieres mandarme algunos ejemplares por ser colaborador. ¿Colaborador ? Por cierto de los ejemplares que me tenías que dejar en casa de mi hermano a día de hoy no sé nada.
Si me hubieses enviado una copia antes de imprimir, te habría sugerido que el titulo fuese el mismo pero sin el autóctono, ya que la mayoría de las palabras son de la provincia, la comarca e incluso del castellano más puro.
También de alguna manera hubiese separado las palabras verdaderamente autóctonas de las que no lo son o al menos las hubiese subrayado o marcado en negrita para así diferenciarlas del resto.
El error de imprimir mi a apellido con z en vez de con s no existiría y mucho menos el apellido “Ganga” en vez de García. No estoy de acuerdo de cómo está redactado el prólogo ya que cualquiera puede pensar que eres el único autor y aunque me dices que a tu amigo Pedro Delfín le comunicaste que éramos dos las personas que lo habíamos hecho, entenderé que de mi no diga nada ya que como bien me dices es un Sr de Elda que a mí no me conoce pero sí que sabiéndolo y para evitar equívocos al dirigirse a ti debió hacerlo como coautor y no autor.
Sé que ahora es tarde para lamentarse, pero no tendría que hacerlo si se hubiese contado conmigo antes de tomar la decisión de mandar a imprimir. Mi impresión tras ver el libro, leer noticias y recibir llamadas de conocidos y amigos es de la que puedo ser colaborador y solo en algún artículo aparecido después de la presentación aparece mi nombre junto al tuyo como coautor, eso sí en los titulares aparece únicamente el tuyo, y no te digo en las reseñas antes de la presentación “El libro de Manolo” Manolo presenta su libro” “Cucha lo que ha escrito Manolo etc. etc.
Me preguntaste si estaría en la presentación y te respondí que si estaba en Zalamea sí, pero que si no la podías hacer tu solo, tal vez si hubiese estado allí las personas que hablaron después habrían sabido que éramos dos coautores y hubiesen informado con respecto al error cometido con mi apellido. Por cierto fue casual que en la proyección estática de la portada del libro antes de comenzar con el resto de diapositivas solo se viese tu nombre, o fue que el mío no cabía en la pantalla?
Que el futuro te depare muchos éxitos en los libros que sigas escribiendo que seguro que serán bastantes. Felicitarte por donar los beneficios a Manos Unidas lo que ha sido un gran detalle.
Tal como me pediste tras tu llamada, estaré encantado y si Dios quiere y voy en Marzo a Zalamea nos tomaremos esa cerveza o café mientras charlamos todo lo que desees sobre este tema”.
…………………..Y AL CESAR LO QUE ES DEL CESAR
Saludos cordiales