lunes, 2 de marzo de 2009

“La roja” sacó la casta y el orgullo

Merecida y trabajada victoria del Zalamea frente al Chanza por 4 goles a 2, en un partido donde tuvo que remontar un 0-2 inicial. Se podría hablar de épica en el Valero Rojas porque tuvo que fraguar la victoria sobre un terreno en pésimas condiciones_una práctica muy habitual desde que abandonara el Perea Anta.

La tarde se cernía fea y desagradable, más aún cuando al comienzo de la enmienda llegaron los dos goles tempraneros del rival con un conjunto zalameño dormido o como en “la Tacita de Plata”, con resaca carnavalera. Pese al marcador el equipo entrenado por Juanma se sentía superior y así comenzaron a llegar con peligro al área visitante. En varias internadas estuvieron a punto de inaugurar el marcador pero faltaba el acierto para alojar el esférico dentro de la red.

A poco de llegar al descanso Portu, en una jugada llena de casta y no exenta de calidad, se va de cuantos rivales le salen al paso para plantarse delante del meta y lograr el 1-2. “el pistolero” de esta manera marcaba el camino a seguir para hacer ver a la plantilla y a la afición que se podía remontar el partido. Al descanso se llegó con una última jugada de peligro donde cayó lesionado Carlos tras una dura entrada del lateral derecho del equipo serrano. Hasta el momento, Carlos, jugando de delantero centro, estaba cuajando un gran encuentro con movilidad y facilitando la entrada de compañeros en posiciones de ataque. A destacar también en estos minutos una intervención de Juan Centeno, a la postre decisiva, que hubiera supuesto, a no ser de una gran parada, el 1-3.










Al vestuario entraron con la certeza de que se podía dar un vuelco a la situación, pero con el inconveniente de que el campo se estaba poniendo cada vez más pesado y el juego se iba a trabar bastante. Así Juanma arengó al equipo para que salieran motivados y a darlo todo desde un principio. La primera consigna era adelantar líneas y ejercer presión arriba para robar balones y montar acciones con peligro. Esta circunstancia ya se dio en el partido de la primera vuela, cuando el Zalamea logró marcar 5 goles en Cortegana gracias a una fuerte presión. En aquella situación el juego se desarrollaba sobre un perfecto tapete de hierba artificial, pero en Campillo la presión se antojaba aún más determínate por el barrizal que hacía difícil hasta el golpeo.

Con el empuje del Zalamea llega una jugada más que decisiva para el desenlace del encuentro, el delantero centro del Chanza se va a la calle por doble amarilla y deja a su equipo con 10 en el campo. Juanma ve la hora para meter dos cambios ofensivos y da entrada a Isaac y Migue por Eloy y José María. A los pocos minutos llega el 2-2 obra de un inspirado Portu en gran jugada individual dentro del área. Celebración por todo lo alto y vuelta al trabajo para conseguir el triunfo. El Zalamea era un vendaval en estos minutos y el conjunto visitante se veía desbordado continuamente por el empuje rojillo. El gol podía llegar en cualquier momento ya que el dominio, a pesar del campo, era aplastante. Pirulo se pudo plantar sólo delante del portero pero un rival lo agarró de la camiseta cuando la grada se preparaba para festejar el tercero. Incomprensiblemente, y pese a ser el último defensor, el colegiado no le mostró la roja ante la indignación local.

En estos momentos el equipo entrenado por Juanma se veía exultante, lleno de poderío y con dinamita arriba, por lo que el 3-2 llegó de los pies de Pirulo en una de sus internadas por la banda derecha. Se había conseguido la remontada y Pirulo lo celebró por todo lo alto, incluso dando una espectacular voltereta para terminar besándose el escudo de la camiseta. Para terminar de redondear la tarde, Pablo de un gran cabezazo logra el 4-2 y lo celebra saltándose a la grada donde se encontraba la hinchada zalameña.